La escultura se inspira en
evidenciar el principio de toda discrepancia, de toda confrontación.
Utilizo con las voces SI y NO
como sustancia de la desavenencia y al mismo expreso las voces “SI” y “NO” en
todos los idiomas del mundo en un intento de reforzar el concepto global de la
guerra, la paz y en general los comportamientos humanos.
El hecho de expresar todos los
idiomas del mundo hace énfasis en el concepto de diferencia y pluralidad, y no
es sino un canto a la hermandad de la raza humana.
“SI” y “NO” son los ladrillos
con los que se construye la disputa.
Diferentes visiones y pareceres
encontrados no son sino caras de una misma moneda. No se puede entender el “SI”
sin el “NO”, como tampoco se puede entender el concepto blanco sin referirse al
negro o día y noche, claro ... oscuro.... etc.
SI y NO aun siendo opuestos forman parte de un todo. El ser humano
debe saber conciliar y aceptar la diferencia en ideas, opiniones y personas.
A partir de esta idea se crea todo el ideario de tolerancia y
aceptación que el monumento quiere simbolizar.
La escultura es estimulante, abierta al mundo y expresa evolución,
invita al ciudadano a contemplarla desde dentro, a sentirse abrigado por
ella... a mirar su entorno de una manera diferente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario